lunes, 30 de junio de 2014

“A Camilo Aldao con Laiseca y Leo”, por Juan Guinot

A poco de casarme, un poco por evadir una fiesta de despedida de soltero y otro poco por darle el gusto al Maestro, con Leo Oyola se nos ocurrió la idea de ir a Camilo Aldao, la mismísima cuna del Conde Lai.
Algo de lo que vivimos, lo cuento en esta crónica que escribí para revista El Ansia http://www.revistaelansia.com.ar/blog/?p=196


sábado, 28 de junio de 2014

Star Wars Team para Misión Kenobi

Hay revuelo en la Galaxia. Bicho Verde y Leia bailan lento. Han Solo se arrastra por el piso y Chewy está por actuar. El Petiso Calentón aprovechó el desconcierto y manoteó una espada láser (se sabe en La Galaxia que no hay nada más peligroso que Ewok con espada láser). Los descabezados hacen la postura yóguica de El Perro (está contemplado en el estatuto laboral de La Fuerza) . R2 y C3PO se quejan porque dicen que los robots son los únicos que laburan. Anakin mira a Dath Vader y dice que la cosa pasa de claro a oscuro. Mandá ya tu pedido antes de que se arme la batalla.

miércoles, 25 de junio de 2014

La Guardia del Río Luxán (para el aniversario de www.noticiasmercedinas.com)

Guardia del Río Luxán 

Juan Guinot
El problema no es la falta de agua. El cauce del río casi no la tiene. Tampoco lo es el ácido y los químicos, que sí corren por el curso serpenteante y espumoso, cargados por los gotones de ácido colorinche, llovidos desde el cielo.
La principal causa que sostiene a los habitantes de La Guardia del Río Luxán es, justamente, cuidar que nadie les robe el río, esté como esté.
El poblado está constituido por Profesor Prócer, Zombi Recova y Perro Pensador.
Los tres conviven, sin problemas, a la vera del río Luxán para cuidarlo del “interés foráneo por lo nuestro”. Los Guardianes son una especie de Triunvirato de lo que quedó, la suma del poder y del pueblo, el eslabón final de una cadena que está más oxidada que aquellas que cuelgan de los pilotes de cementos de, lo que dicen fue, la Pasarela del Parque.
Son los únicos, los que quedan, por una simple razón: a falta de agua para tomar bueno es el glaciar con cianuro de los Andes. Entonces, quienes sobrevivieron a las tormentas ácidas partieron en dirección a los picos de las montañas.
Los que quedaron en el llano, en su gran mayoría, están enterrados. Deben su presente de no estar en esta vida a Zombi Recova. El zombi es un vecino inmortal de La Guardia del Río Luxán, revivido al pie de la Cruz de Palo, ni bien pasó el cometa Halley de 1910. Zombi Recova es el fiel representante del aborigenado perecido aquella tarde, de pólvora y boleadora, en el Siglo XVIII, donde la indiada reculó muriendo (gesta rememorada por décadas con el inmemoriable rótulo de “Último Malón”).
Ultimo o primero en morir, Zombi Recova revivió, como se dijo, de entre los muertos, al pie de la Cruz de Palo encaró para el Centro de la ciudad. En su derrotero por calle de tierra, se fue manducando cuanto cerebro humano se le cruzó por el camino. Y detuvo su paso destartalado, en la plaza principal, no por cansancio, sino por oferta de alimento: el zombi recaló en la Recova, donde abunda el cerebro fresco. Con el pasar de los siglos, sin mover el culo de una silla, se alimentó de la cerebrolera local, mostrando particular afición por morder al vivo (la sinapsis neuronal le pica en la lengua como aquellos caramelos efervescentes lo hacían en las papilas de los niños).
En las catacumbas de la Fundición acumuló el parque de neumáticos esparcidos en una ciudad en ruinas (y sin gente), pero llena de autos (y motos).
Profesor Prócer actuó rápido, con conocimiento, con una quinta reencarnación en él mismo a cuestas (y en el mismo punto del planeta) conoce el terruño como la barba candado (con prominente barba del mentón) que le brota en cada reencarnación.
Y si Zombi Recova no se comió a todos fue porque quince miembros de la resaca citadina, tarde pero a tiempo, descubrieron el modus operandi de Zombi Recova y, como se dijo, se mandaron a mudar a la montaña que, más temprano que tarde, los mataría con el blend de hielo y cianuro.
Zombi Recova pudo quedarse solo, como zombi malo, comiéndose el contenido craneal de Profesor Prócer y Perro Pensador, pero no lo hizo porque sus dos vecinos se avivaron a tiempo, gracias a un momento ilustre (uno más) de Perro Pensador. El can (deriva de una mutación genética de empleado público y caniche Toys) dijo al Profesor Prócer: “No hay mordida sin manzana, no hay serpiente sin Adán. Hacele un cerebro tipo chicle para que se entretenga y no nos lastre”.
Y Profesor Prócer eso hizo. En las catacumbas de la Fundición acumuló el parque de neumáticos esparcidos en una ciudad en ruinas (y sin gente), pero llena de autos (y motos).
Profesor Prócer actuó rápido, con conocimiento, con una quinta reencarnación en él mismo a cuestas (y en el mismo punto del planeta) conoce el terruño como la barba candado (con prominente barba del mentón) que le brota en cada reencarnación.
Profesor Prócer actuó con dominio sobrado de la situación y le metió en la mano de Zombi Recova ese pedazo de cerebro placebo, chicloso, adobado con pilas (de cinco siglos atrás, que las hay por doquier) para otorgarle el picor de lengua que Zombi Recova tanto busca.
Profesor Prócer anda con una bolsa de cerebros de goma para reponer en la mano de Zombi Recova antes de que este se la reponga a él.
“Mascar in eternum, mientras no se avive, esa es la cuestión”, dice perro Pensador, de cara al curso espumante del Río Luxán que deben cuidar del cuatrero de la gota de agua, peste sin código ni clase que es capaz de todo por cargar su botella de atraco.
Zombi Recova no se da cuenta del cerebro placebo, de caucho y pila, y si se diera cuenta, al segundo se olvida. Es que Zombi Recova sólo sabe aquello que ve y recuerda la nada. Su memoria de mosca, lo pone una y otra vez, de frente a cerebro de caucho y dale que te dale, masca que te masca, desde hace varios meses. La clave es que nunca le falte.
En eso andan los tres, cada uno, cuidando el pedazo de costa del río que les toca, cuando, entre las nubes de lluvia ácida, aparece un platillo. Perro Pensador, se pone reflexivo, extrañamente no ladra, mientras mira el bólido espacial.
La nave cae vertical sobre la Tierra en un descenso que, no termina siendo brusco, aunque, vale decirlo, casi se lleva puesto al can mutante.
La nave es muy ruidosa. Por suerte los motores se apagan, vuelve el arrullo espumante del río. La escotilla se abre y baja una ET vestida con un traje fucsia que la cubre de los pies a la cabeza, y se le pega a un cuerpo 90-60-90, escultural, definitivamente de otro planeta. El rostro pálido, los labios finos y bordó, los rasgos angulosos, los ojos celestes y el pelo blanco suman al efecto logrado en los tres habitantes de La Guardia de Luxán, casi olvidados de lo que era encontrarse con una mujer, así sea alienígena.
–Bienvenida a la Tierra –se adelanta Profesor Prócer rascándose la barbilla con la mano izquierda, mientras que con la derecha refuerza la dosis de cerebro de goma para mantener entretenido a Zombi Recova.
–La Pampa tiene el Ombú, también tiene este perro. Si querés te hago un cachorro.
–Vaya a cucha –Profesor Prócer cruza al can mutante y retoma la atención a la recién descendida – No se preocupe, el perrito es bueno, no se va a meter con usted, bastante tiene con los huesos de la ciudad para divertirse enterrando. Bienvenida a La Guardia del Río Luxán. Usted, dirá, este semental está para servirla.
–Franca Fronch – Phone – House –dice la extraterrestre y las tetas se le encienden.
–Guauuu –exclama Profesor Prócer, apoyándose del hombro de Zombi Recova que sigue entretenido con el cerebro de caucho.
–Hombre que ladra no muerde y, mucho menos, sabe inglés. Si quiere le doy mi tubo para que hable –suelta el Perro Pensador y se pone panza arriba.
–Franca Fronch –Picture - Phone – House –vuelve a intervenir al pie de la escalinata del platillo.
–¿Qué lo que quiere esta? –pregunta Profesor Prócer.
–Cerebro –responde Zombi Recova, a poco de consumir el cerebro placebo que tiene en la mano derecha.
–Vos no, salamín, le pregunto al perro.
–El amor es una inversión, el concubinato ahorro. Hace un frío de cagarse –suelta Perro Pensador desde el suelo, panza arriba, empapado por los gotones de lluvia ácida, artificiando un tembleque corporal – Platillo donde cabe uno, cabe un perro.
–Franca Fronch – Picture – Phone – House – Water –suelta la ET y la luz de las tetas se apaga.
–Ahí lo pesqué, ¡water nunca! –amenaza Profesor Prócer y arenga a la tropa- Compañeros, la invasora quiere nuestro río, activemos el modo de defensa espartana.
Profesor Prócer, Perro Pensador y Zombi Recova (traído del brazo que no tiene cerebro de goma por Profesor Prócer) se ponen espalda contra espalda y se plantan para enfrentar a la extraterrestre.
–No hablau bien spanish, saco foto espacio, voy Marte, tanque nada, cargo agua, ir Marte.
–Para el río lo que es del río, para el río liberación –canta Perro Pensador haciendo más Piero los rulos de Caniche.
–Y nos quería conquistar el corazón para robarnos el río, vil precio para el hombre probo –dice Profesor Prócer, casi hablándole a Zombi Recova, como dándole consejo. El zombi le pasa la lengua a la palma de la mano con los pedacitos de goma del cerebro placebo.
–Yo Franca Fronch – se les acerca ella y enciende la luz de la teta derecha.
–Profesor Prócer, un busto –dice al posar su mano derecha sobre la teta derecha de Franca Fronch- Perdón, quise decir un gusto –corrige, en tono solemne, la palabra sin corregir la ubicación de la mano que sigue posada donde ya se dijo.
–Upalalá al perrito que viene en son de Paz, prenda la otra luz –Perro Pensador está en dos patas, apoyado sobre los muslos de la ET.
–Pocou de esou –Franca Fronch sigue camino hacia la costa, con los pechos en modo sin luz y con los tres guardianes a su espalda.
–No se mueva o disparo –agarrado de la barbilla, amenaza Profesor Prócer con el despecho del hombre a quien le acaban de romper el corazón.
–El que no mama no llora. Quiero llorar, préndeme la otra luz –suplica Perro Pensador ante la indiferencia de Franca Fronch, quien sigue atenta al curso de agua.
–No servir –Franca Fronch hipa, llorisquea, casi se quiebra, cosa que bien el vendría a Perro Pensador así le da la altura para cumplir su cometido.
–Nada de ponerse mal, que el río sea nuestro, no puede deprimirla –con tono paternal, Profesor Prócer se le acerca, la abraza.
–No volar plato, stop acá, for ever –Franca Fronch rompe en llanto.
Las lágrimas celestes corren por sus pómulos, van a pasar por los labios y de ahí, se montan a los labios de Profesor Prócer, quien acaba de enchufarle un chupón que se hace largo, se estira como chicle por la eternidad.
Las bocas fundidas de la ET y Profesor Prócer, se bañan de sangre roja y celeste, mientras Zombi Recova se deglute la masa encefálica de ambos. Es que, distraído por el beso, Profesor Prócer olvidó reponer en la mano de Zombi Recova la dosis del cerebro placebo.
Perro Pensador, alejado de la escena del festín, está al pie del plato volador, con la pata levantada, ejecutando una meada perfecta que entra al agujero de recarga de combustible. Baja la pata y se pierde entre la maleza. Reaparece con una manguera que trae prendida al hocico y desprende un chorrito de agua desde la punta. Enchufa la manguera en el agujero.
–Decime vos –le dice a Zombi Recova – Como vino a perder la cabeza éste por una mina. Es de creer o reventar dos tetas luminosas tiran más que una yunta de bueyes. –Se sienta sobre los cuartos traseros, se pasa dos lengüetazos por las pelotas y vuelve a hablar –. No sé, a veces las cosas no se dan como lo pensás. Mirá que, con la Franca Fronch, tuve no menos de quince sesiones de chateo mental, y le conté que tenía el agua para ella, para que me lleve. Decime vos por qué carajo no esperó un poco –Perro Pensador se pone en cuatro patas, saca la manguera del tanque- Y bué, habrá que seguir con el plan, irse a la mierda antes que la mierda te llegue al cogote. Me da cosita irme sin ella, pero bué, ya voy a encontrar a mi media naranja en otra Galaxia. Sabés qué, voy a extrañar este río, la lluvia ácida, a vos, al Profesor Prócer. Si te lo volvés a encontrar, cuando suceda su Sexta Reencarnación, decile cómo fue todo, así no hay rencores –Zombi Recova, de lo más entretenido con la faena de cerebros, apenas si le presta atención a Perro Pensador- No sé para qué te hablo, si al final no te acordás de nada. Bué, hermanito, por ahí, quién te dice, las vueltas del espacio, el siglo que viene, de pasada, bajo a saludarlos –Perro Pensador trepa las escalinatas, sube al plato, la escalera entra a la nave, se queda un rato mirando la lluvia perpendicular, ácida, golpeando en la espuma del río que crece y crece- Si es que este planeta, todavía existe –la puerta de la nave se cierra, el platillo volador emite un ruido ensordecedor, se despega del suelo, asciende vertical y se pierde entre las nubes, lejos. En pocos segundos, La Guardia del Río Luxán vista desde el espacio será un pestañeo, uno solo, el del final.

Si querés leer los demás textos por el 8vo cumple del portal www.noticiasmercedinas.com

martes, 24 de junio de 2014

Maradona, la antena y la mano de Dios

“Pirata hijo de una gran puta”, dice mi viejo, cara a cara con la pantalla, con la imagen que va y viene porque el buster de casa anda para el orto y Mercedes está en un pozo y las ondas llegan mal, por más que estemos a cien kilómetros de Capital. Mi viejo le pega a la carcasa de la tele, la pantalla duplica la cantidad de jugadores, que ya venían viéndose torcidos. Papá se pone verde y tengo miedo que se me muera en medio del partido. Salgo disparado al patio, me trepo a la casilla del gas. Manchita ladra; siempre rompe las pelotas con sus ladridos cuando subimos al techo y, cuando bajamos, nos muerde los talones, es su forma de vengarse porque nació un dos abril, cinco años antes de la Guerra y desde hace cuatro años no le damos medialunas por su cumpleaños porque, desde 1982, ese día no se festeja nada. Llego al techo, descubro que una de las puntas de cobre del cable que va a la tele se soltó del buster y lo recontacto. Mi viejo grita “Vayan a llorar a la ONU y la re concha de la Reina Madre”. Malo y loco, es el exocet a punto de tocar el Sheffield. Si suelto el cable, a la mierda la imagen.

Petardos, aullidos de Manchita, gritos de Gol y Vamos Diego Carajo. Y no voy a bajar, esta batalla depende de mis manos, al pie de la antena, cerca del cielo, mi mano es la mano de  Dios.

sábado, 21 de junio de 2014

Misión Kenobi en El Nuevo Cronista

Foto: Mai Albamonte Pizarro.
Salió una entrevista en El Nuevo Cronista.
Gracias Yésica Lándola.
Acá. podés leerla: http://www.nuevocronista.com/juan-guinot-lucha-por-el-ambiente-con-la-literatura/

sábado, 14 de junio de 2014

Río Luján y el Esteróptico alemán

Antes de que te llegue por otro lado, te quería contar que el esteróptico de la Unión Europea está sobre los habitantes de Mercedes y mucho tuvo que ver noticiasmercedinas.com. Omitiré mención alguna de nombres y apellidos, no porque tenga compromisos con las partes involucradas, simplemente porque poner algún nombre y apellido en alemán te perdería de la esencia de mi crónica.
Bien, vuelvo al principio. Estaba en una reunión en Saarland, Estado de Saarbrüken, al sur de Alemania. Se trataba de un encuentro literario y el Secretario de Cultura había tomado la palabra hacia un buen rato. Mi des-manejo del idioma alemán hizo que buscara alguna distracción: jugar a encontrar las diferencias entre los miembros de la Sociedad de Poetas sentados a la mesa. Este juego resultó opiáceo, los tipos eran iguales, parecían réplicas de acero.
Teniendo al alcance de los dedos una computadora, que muy gentilmente me había acercado el Secretario de Cultura para que descargara unos cuentos de mi autoría (que dijo traduciría en voz alta, y a modo de homenaje, al cierre de la reunión), sucumbí a la tentación de recorrer páginas de Internet para sopesar el plastrón en el que me encontraba atrapado. Así fue que pasé algunos diarios digitales y me metí en noticiasmercedinas.com.
El portal del amigo Fala está entre mis predilectos, pero básicamente por un tema: la ecología. Noticias de las últimas horas daban cuenta de una bicicleteada desde la descarga cloacal del municipio en el río Luján al Parque. Eso me llevó a recorrer el histórico de notas del portal sobre la contaminación del río Luján. Pasaba las notas y me ponía cada vez más loco. Sabés, el río me puede, me saca lo peor, es algo horrible que arrastro. El río fue la primera de mis derrotas. Te preguntarás por qué. Muy simple. En el ´74 o por ahí, fui a la inauguración del balneario. Toda la ciudad chapoteaba debajo de la pasarela, eso era alegría en estado puro: sanguche de mortadela, botella de crush y pelota pulpito. Había tocado el cielo con las manos. Ponele que fui dos veces más a nadar y, a la tercera, la ilusión se me acabó de golpe: un cartel avisaba de la prohibición de bañarse. La razón: un pibe casi se murió por tragar agua del río. Se supo entonces (extraoficialmente) que el cauce traía consigo las porquerías de curtiembres, mataderos, cloacas y Ducilo. Pasé del cielo al infierno sin paradas intermedias. Y todo siguió así, no da este momento para que te lo cuente, pero mi familia y amigos ahí empezamos a luchar por el río, yo era un chiquilín. Mirá, hasta tuvimos que bancarnos la extorsión de Ducilo. Sabés que los tipos nos sacaron el trabajo que mandaban a nuestra fotocopiadora después de que mis padres suscribieron una denuncia por contaminación del río. Fue horrible, digo, lo del río: de un día para el otro, aparecieron miles de peces muertos (flotaban con las panzotas infladas de veneno) en la parte del río que cruza el Parque; para ser más preciso, desde la desembocadura de la zanja que nacía en Ducilo (esa que está al lado del puente de la Trocha). Bueno, por ahí con esto entendés algo de la génesis de mi enojo y mi manía con leer del Portal qué carajo pasa con el río Luján. El portal del Fala es consecuente con el tema, el tipo como buen ariano mete topetazo y no lo pueden parar, por eso lo sigo.
Esa mañana, en la reunión con el Secretario de Cultura de Saarland, no fue la excepción. Me empecé a rascar la cabeza, morderme el labio, bufar. Y yo me transformo con el tema de la contaminación, me saca, muto a increíble Hulk. Imaginate la cara de loco que tendría que el Secretario de Cultura dejó de hablar y, por primera vez en dos horas, los doce alemanes movieron los globos oculares para enfocarme con sus miradas y dibujaron un rictus oxidado ¿Podés entender el grado de drama en el que me encontraba? El Secretario, en un español aprendido en sus estadías estivales en las playas de Castelldefells, cerquita de Barcelona, se me acercó diciendo que leería uno de mis escritos, que no debía ponerme así. Yo ni tronco de bola, seguía ahí metido en las notas del río y, para cuando el Secretario de Cultura se me acercó y visualizó la noticia del portal ardió Troya. Uno de los poetas que tenía a mi derecha y chivaba chucrut no dudó en ceder su sitial, el Secretario se acomodó a mi lado y tradujo a vivo voz alemana aquello que leía desde el portal. Yo no entendía un pomo, pero ponerle al cuadro la musicalidad de la lengua alemana era lo que faltaba para la pintura del terror. Fue hora, hora y media, el tiempo en que ellos me preguntaron y yo respondí. No escatimé en detalles, me despaché, más bien me desangré a través de las heridas que me inflingió el maltrato del río a lo largo de mi vida. Ellos decían que no podían creer que toda una ciudad viva de espaldas al río. El Secretario de Cultura sacó de un bolsillo interior del saco el celular, habló con alguien y me dijo que aguardáramos un instante. Para entonces, los doce poetas ya estaban arracimados sobre mis hombros, atentos a la pantalla que yo les actualizaba a cada instante. El celular del Secretario sonó, no habló, colgó y ahí me dijo lo del esteróptico. A ver, eso entendí yo. Él lo dijo en alemán mezclado con catalán. Se trata de un aparato de la Unión Europea. Ese bicho anda orbitando el espacio, metido dentro de un satélite y ausculta a la gente. Nada complicado. Los auscultados casi no se dan cuenta y solo les da un picor en el cuero cabelludo muy similar a los pinchacitos de los piojos. No te doy más vueltas, el tema es que el esteróptico miró la mente de algunos niños mercedinos menores a nueve años y comprobó que ni siquiera saben de la existencia del río Luján. Ante tal hallazgo, ampliaron la muestra a hasta los veinte años y lo mismo. Viste, estos no corren, vuelan y si algo tienen, es que son expeditivos. Bien, avanzaron con la muestra a todas las edades y en el 97,59% de los esteropticados desconocen al río Luján y, para peor, si se los pusiera delante del río tan siquiera lo verían. Te podrás imaginar si para ese entonces sangraba por la herida, con esto era un océano de sangre. Tanto despotricar por el maltrato de un río y la gente ni la más pálida idea de lo que se habla. Con esto entiendo por qué nuestros vecinos nos creían locos al escucharnos hablar del río. El Secretario de Cultura intentó calmarme, me dijo que el daño es reparable, se trata de algo que se puede trabajar. Primero deben mirar con el esteróptico todas las mentes mercedinas para descubrir primero donde hay que tocar. Luego desbloquear el pedacito de la función de la vista que no les deja ver el río. Al final, eso es lo más difícil, descubrir a los culpables. Mencionó algo del reclamo que harán a nuestro Gobierno en la próxima reunión de G-20, al Tribunal de La Haya, de la salida de un Canciller Argentino. Me prometió que pronto irán a Mercedes y beberían de ese río con sus pajitas. Esto por ahí te resulte raro, pero tiene que ver con una costumbre ancestral, que ese mismo día hicimos al concluir esta reunión. Antes de dar por finalizada cada jornada laboral todos los funcionarios públicos deben tomar con una pajilla del río Saar (es el curso cristalino que recorre Saarbrüken). Estábamos ahí, a al vera del río Saar y cada uno sacó su sorbete del bolsillito del saco (comparten espacio con lapiceras). Se arrodillaron, reclinaron el torso, metieron la pajita entre sus labios, introdujeron el otro extremo en el cauce y bebieron. No una gota, saciaron la sed de un mamut. Fue impresionante. Eso dice que harán en el Parque, junto a los funcionarios municipales y todo vecino que quiera sumarse. Creeme no veo la hora de pasar por las noticias del portal y ver esa foto. Será un lujo. Si el esteróptico funciona, quién te dice, por ahí hoy mismo empieza una procesión de bebedores del río Luján y mirá si vuelven los sanguches de mortadela, la crush y la pelota pulpito, eso sería tocar de nuevo el cielo con las manos, salir del infierno.
Mirá, si te parece, para no ilusionarme al cuete, porque no va a ser la primera vez que algo hecho en Alemania no nos funcione (nunca olvidaré la televisión Telefunken a colores que compramos para el Mundial ´78 y nos mostró todos los partidos de color púrpura), andá mirando si los mercedinos se rascan mucho la cabeza, fijate bien, va a ser una especie de ataque masivo de piojos. Fijate y contame, así me quedo tranquilo que ese esteróptico funciona.

Relato que escribí para el noticiasmercedinas.com. Junio, 2010.-

miércoles, 11 de junio de 2014

Independiente: La Diabla Diosa

De tus tetas habla el estadio. En la Peña lo cuentan y, milagrosamente, se multiplican tus tetas en zaguanes, fiestitas de Quince, bares, velorios, siestas de mates con tortas fritas, salidas de las escuelas y donde pinte nombrarlas, porque tus tetas, Diabla Diosa, engualichan al pueblo o, mejor dicho, al pedazo de pueblo que las nombra.
El Cura, que escuchó de ellas, y no precisamente en el confesionario, decide intervenir. Dice que el Diablo tiene que pasar a pagar su factura por la Casa del Señor. Lo dice en serio. Te convoca por carta, pide la intercesión de tu santa madre (Presidenta de la Liga de Madres de Familia) y lo dice al aire, en la radio donde aclara que, para él, tu diablura, Roja, y tu locura de pelar las tetas en medio de un partido son motivos suficientes para practicar un exorcismo.
Te convoca a hacerlo, aunque nunca haya hecho uno, pero sabe que siempre hay una primera vez y cree merecerse el debut, tener su partido soñado, ese que lo convertirá en el ídolo de las multitudes.
Y vas porque tenés la camiseta roja en el alma y nunca arrugás, la jugás donde sea, y tus tetas se hacen enormes cuando te toca de visitante.
El tipo con sotana te espera afuera del templo, protege la valla gótica, tiene las manos abiertas, quiere atajarte, quiere atarjarlas, no sabe a cual primero, pero va a usar las manos para terminar con este partido.
Te le ponés cara a cara y el cura, antes que hola, dice soy de Chaca, Funebrero, te lo aclaro para que no me pienses de la Academia, y arranca, Señor, grita con los brazos abiertos, te pido que saques el demonio de este cuerpo y te mira las tetas, metidas adentro de la camiseta diabla.
Tus ojazos de puntas estiradas, verde-césped-recién-cortado, le clavan la mirada. El Cura tira un paso a la retranca, arruga, porque te ve más Diosa que Diabla; confundido, entiende que todo se le complica y lo dejás mal parado.
Debajo del arco gótico, queda en ridículo, bajo la atenta mirada de los hinchas que arremolinan las ganas de ver el exorcismo, ese que haría sacar las tetas diablas y curarte por siempre.

Y vos que te das cuenta de que ya ganaste, no lo gozás de más, tenés códigos, tenés el gen de la jugadora que hace la historia, entonces no sacás las tetas, estirás el brazo derecho y, con la mano abierta, dibujás una cruz en el aire y te vas.
Juan Guinot, Junio 2013
Relato publicado en la antología "Gambeta Cero" (Chelén, 2013)

Cementerio de Darwin - Justicia Terrena

Te había contado que, en enero, estuve en Las Malvinas. Durante el viaje, saqué esta foto en el Cementerio de Darwin. 
Me acabo de enterar que autorizaron la identificación de los cuerpos de los soldados enterrados baja esta lápida. Es un acto de Justicia Terrena.

sábado, 7 de junio de 2014

Misión Kenobi en Lápiz, pluma y veneno

Acá podes escuchar el programa completo.
Con Maria Inés Nouzielles hablamos de Misión Kenobi
https://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=ZGA92_uobdo

jueves, 5 de junio de 2014

martes, 3 de junio de 2014

Este jueves, a las 15hs, en la radio

Este jueves, de 15 a 16 hs voy a estar en el programa de radio Pluma, lapiz y veneno.
Se puede seguirlo por internet y hacerte amigo de ellos acá:https://www.facebook.com/PlumaLapizYVeneno?notif_t=fbpage_fan_invite
Espacio radial dedicado al arte y la cultura. Produccion y conduccion: Maria Ines Nouzeilles. Los jueves 15h por FM Plaza 92 o www.pilaradiario.com

lunes, 2 de junio de 2014

Muestra Fotoletraje - Mercedes

El viernes se abrió la muestra. Fotos y textos. Natalila Giumelli y Mariano Fuaz nos acercaron al mundo de los fotógrafos. En cada imagen hay relato y en cada relato nacen imágenes. Por eso fue un ida y vuelta, fotos y textos hechos antes de la convocatoria, dieron nacimiento a textos y fotos nuevas. El resultado: Fotoletraje.

Fútbol y literatura - Vicente López


Misión Kenobi en El Barco Ebrio




El Barco Ebrio navega en las aguas literarias. Lleva amigos talentosos y un bar a bordo (Profano).
El viaje se repite el primer domingo de cada mes (20hs), en calle Acoyte 954, en un punto del mapa donde casi no es Villa Crespo y no se lo asume como Caballito (y se opta por llamar Parque Centenario).
Héctor Alvarez Castillo se prende al timón, la nave parte. Lo que sigue es estar ahí y compartir los sacudones de las olas junto a una tripulación que sabe de los viajes creativos.
Anoche leí Misión Kenobi Exposición de la actual narrativa rioplatense)
Agendate este ciclo literario, que crece mes a mes.
Pablo Martínez Burkett me subió a este barco y le estaré eternamente agradecido por el viaje.